jueves, 9 de julio de 2009

Acerca del posible rompimiento de la soberanía en Honduras.

Soberanía, según el diccionario de la RAE es la “Autoridad suprema del poder público”, pero para analizar a profundidad donde verdaderamente es interrumpida la soberanía de un estado es necesario tomar en cuenta de donde viene esa autoridad.

Luego del golpe de estado o “sucesión de poder”, como prefieran llamarle, ha corrido infinidad de comentarios sobre una supuesta violación de la soberanía hondureña a manos de la política internacional adoptada por el mundo entero, lo cual analizare desde mi punto de vista a continuación.

En las Ciencias Políticas uno de los conceptos clásicos de Soberanía ha sido el de Jean Bodin que es “el poder absoluto y perpetuo sobre una república[1]” sin embargo según Bodin este poder recargaba sobre un soberano que mandaba a todos y no obedecía a nadie. Luego seria Jean Jacques Rousseau quien renovaría el concepto señalando que “la soberanía debe descansar en el pueblo, y esto daría paso al poder, enajenando sus derechos a favor de la autoridad.” Por tanto todos los individuos serian libres y a la vez súbditos de una autoridad creada por ellos mismos y donde también participarían, esta idea fue llamada soberanía popular.

Debido a esto surge el Conde Sieyès quien dice que la soberanía debe descansar sobre la nación y no sobre el pueblo, ya que con el populismo mandan las mayorías y esto da lugar a el atropello de las minorías y el rompimiento de sus derechos, por tanto debería ser tomada también la historia y cultura de la nación para formar la soberanía.

En la actualidad gracias a la Democracia actual y al desarrollo de los pueblos tanto la soberanía popular como la nacional forman a los estados, y esta soberanía esta expresada plenamente en la Constitución de la república de cada estado. Tomando en cuenta esto es deducible que quien pase por encima de la constitución de un estado a su vez está pasando por encima de la soberanía del mismo.

El pueblo hondureño en el año 2005 eligió democráticamente y siguiendo su constitución política como presidente a José Manuel Zelaya, el cual constitucionalmente debía gobernar el país durante el periodo 2006-20010, La justificación por parte de quienes lo removieron del poder para llevar a cabo esto es el hecho de que el presidente Zelaya violento la constitución política tras una serie de acciones entre las cuales se encontraban la intención de llevar a cabo una encuesta popular para averiguar si el pueblo estaría de acuerdo con una reelección o no.

Sin embargo de ser cierto que Zelaya rompió el la constitución, legalmente competía el llevar a cabo un juicio político y de salir culpable una destitución del poder, sin embargo la madrugada del 28 de junio de 2009, miembros del ejército hondureño, dirigidos por políticos opositores del gobierno Zelayista entraron a la fuerza a la residencia del presidente, lo subieron a un avión y lo exiliaron a Nicaragua, acción que hasta el mismo ejercito, a través de su consejero jurídico acepto ser ilegal[2], justificándolo con el “intento de evitar un baño de sangre”.

A esto la respuesta de la comunidad internacional por completo fue un rotundo rechazo al nuevo régimen, tomando acciones como la suspensión de organismos internacionales de honduras, el cierre de fronteras, entre otras. Sin embargo nunca han invadió ni forzado a restituir en el puesto a Zelaya, y siento esta situación de mucha influencia en los opositores de los gobiernos mundiales es totalmente pertinente que todos los gobiernos mundiales repudien esta acción y están en su libertad de tomar las políticas internacionales pertinentes a su parecer.

Por lo tanto desde mi punto de vista descarto por completo el rompimiento de la soberanía por parte de los organismos internacionales hacia Honduras, ya que acción similar fue impulsada por Estados Unidos ante cuba al momento de la revolución, dándole la espalda, y embargándolo, sin embargo Cuba con el mundo ignorándole, hizo valer su soberanía y resistió 50 años de aislamiento político y económico únicamente comerciando con países amigos.

Debido a este análisis concluyo que si en algún momento se rompió la soberanía Hondureña, jamás fue por parte de la comunidad internacional como nos quieren hacer pensar algunas personas, sino que fue quebrantada por un pequeño grupo de elite hondureña, que se vio afectada en sus intereses por las políticas de Zelaya y reacciono ilegalmente, removiéndolo y exiliándolo del país, y ratifico su postura delincuencial al no permitir el descenso de la nave que lo trasportaba de regreso el domingo siguiente al golpe de estado.



[1] Jean Bodin, Los seis libro de la República.

[2] http://ecodiario.eleconomista.es/internacional/noticias/1378671/07/09/El-Ejercito-de-honduras-reconoce-que-cometio-un-delito-al-sacar-a-Zelaya-del-pais.html